Aspanoa paga el desayuno, la comida y la cena del acompañante del niño ingresado. Es decir, al mismo tiempo que le llevan una bandeja de comida al niño, el padre o la madre recibe otra que abona Aspanoa. Esto permite que los padres estén todo el tiempo acompañando a su hijo, ayudándole a comer si es preciso, sin necesidad de abandonar la habitación para alimentarse.